Una vez, siendo niña, sentí la soledad de su resplandor, aquel brillo perdido en la inmensa oscuridad, sólo quebrada por el leve fulgor de las estrellas, sus eternas compañeras. Aunque nunca negué su belleza, no pude evitarlo, me compadecí tanto de aquel extraño destierro que en mi inocencia, fui haciendo mío y me imaginé que era una mujer...

domingo, 11 de marzo de 2012

LOS RELATOS DEL FUEGO 8. LA MEMORIA DEL FUEGO.




Todavía existen tierras que recuerdan y herederos expulsados que regresan a ellas provocando hogueras para no olvidarles.

En sus pechos conservan aún el legado transmitido por las generaciones sagradas, por los ancestros.

La sangre les llama, pide respeto por los defensores que derramaron la suya envueltos en llamas mientras el sol caía con ellos y la luna cubría su rostro con el más delicado velo blanco, cerrando sus párpados, honrando el momento.

Y su piel del color del fuego…

Danzarán formando un círculo, recordando que todo está en perpetuo movimiento y el gran espíritu, llegado de las cuatro direcciones, les acompañara.

Celebrarán de nuevo la vida gritando, tratando de olvidar que una vez fueron juzgados sin comprenderlos solo porque sus oraciones eran diferentes.

Los cuatro elementos se unirán en el canto del chamán. La naturaleza necesita de armonía.  Sus corazones también.

Canta Chaman, hazme recordar que hasta una estrella o una piedra tienen alma.

Canta Chaman los mandamientos de la fe universal porque tengo miedo de perderla.

Y vosotros, descendientes,  danzad, que vuestras sombras ante el fuego serán más porque yo aunque no esté allí,  bailo con vosotros cada día. Os comprendo porque yo también formo parte de este mundo y la naturaleza también está en mí.

Por un momento la tierra olvidará su lamento. El viento la recorrerá libre como entonces. Incluso los ríos recobrarán su fuerza y romperán durante unas horas los límites impuestos. Y el fuego, como el sol, será testigo,  abrigándoles con su calor.

Las grandes montañas recobrarán su esplendor y todos seremos uno fundidos en la vida, en la naturaleza. Nuestros corazones latirán recordándonos lo que somos, lo que fuimos, y que lo que seremos dependerá del respeto por todo lo que nos rodea.

3 comentarios:

  1. Yo quiero estar allí ese día, mientras, aguardaré con respeto a la danza buscando el significado de mi presente.

    un abrazo, un placer leerte

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  2. Precioso 'canto' Chaman,al paso que buscamos el sigificado e importancia de este presente nuestro.

    Un abrazo.

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  3. este fuego abraza con fuerza y eso me gusta...

    Un besito!!

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Antes de nada: gracias.