Una vez, siendo niña, sentí la soledad de su resplandor, aquel brillo perdido en la inmensa oscuridad, sólo quebrada por el leve fulgor de las estrellas, sus eternas compañeras. Aunque nunca negué su belleza, no pude evitarlo, me compadecí tanto de aquel extraño destierro que en mi inocencia, fui haciendo mío y me imaginé que era una mujer...

miércoles, 28 de octubre de 2009

EL CUENTO Nº47 DE LA LUNA OSCURA. EL ANHELO DE LA LUNA.




Cerca del amanecer la luna se resistió a abandonar la noche.

Sus horas de luz habían transcurrido demasiado rápidas y mucho había sido el amor que había contemplado en su camino diario. Y mucha la vida que latía en cada rincón haciendo palpitar ese universo que a ella se le quedaba cada vez más pequeño. Tanto que, de nuevo, se sintió rozando esa humanidad que anhelaba en su interior.

Sí, aquella noche se resistía a refugiarse en su oscuridad, a iniciar el camino de regreso a ese lugar donde al cerrar los ojos la soledad de sus sueños heriría aún más su corazón.

Y no dejaba de preguntarse por qué su alma no podía ser tan gélida como su propio cuerpo. Porque ella, en cada despertar, luchaba contra el sentir aferrándose a ser una mera observadora. En ocasiones, hasta se convencía asimisma de haberlo logrado, pero la mayoría sufría con cierto placer su fracaso.

Atravesó el bosque silencioso que le anunciaba que ya estaba cerca y quiso gritar desde dentro desgarrando su dolor en un resplandor ciego que no viera nadie, sólo aquel que pudiera salvarla.

Pero su salvación estaba condenada por el tiempo Maldito que le impedía liberarse del peso de la luz y de la oscuridad que formaban su existencia.

Y en la eternidad ni siquiera la muerte con sus promesas podía acariciarla.

En esa noche hubiera luchado contra ese tiempo y esa muerte cobarde. Así de grande era su dolor.

¿Qué pasaría si por una vez se resistiera y no acudiera a su refugio? Alguna vez de lejos vio al sol. ¿Desaparecería? ¿Dejaría de Pensar y de sentir?

Sin embargo, sabía que no podría hacerlo, que no podría condenar a la vida a una oscuridad absoluta, a un tiempo sin noche en el que la muerte acecharía aún con más su fuerza.

Llegando a su montaña, no pudo evitar compadecerse de si misma, derramando lágrimas que bañaron a las estrellas que empezaban a apagarse. Era el momento de renunciar a su luz pero quiso que ellas brillarán hasta entregarse a su sueño.

Sólo un poco de luz en su oscuridad, y al llegar la noche despertaría con más fuerza, y quizás y sólo quizás su nostalgia no le dolería tanto.









12 comentarios:

  1. Ufff niña...Me ha encantado, sobre todo ese final,"Sólo un poco de luz en su oscuridad, y al llegar la noche despertaría con más fuerza, y quizás y sólo quizás su nostalgia no le dolería tanto." Precioso...

    Muchos besitos mi niña.

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  2. Estupendo relato.

    Me ha encantado.

    Besos.

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  3. Ana: la luna es tan remolona como muchas otras estrellas del firmamento o de aquí abajo.
    Yo te confieso que tengo una contradiccion. Me gusta más el día que la noche, pero la luna me enamora más que el Sol. Si tuviera la posibilidad de aprehender a alguno de ellos, no dudaría. La luna sería mía.

    Un beso y sigue, sigue, sigue

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  4. el anerior comentario en el que figura mar, lo hace espronceda

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  5. Mi niñaa, eres unica la escritora de los cuentos magicos, de la luna, del sol, de todo el firmamento.
    Salgo siempre encantado de tu espacio.

    Cálido abrazo

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  6. Hola cielo otra maravilla de cuento el final fue precioso
    un beso grande

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  7. Como siempre, me rindo ante la magia que le imprimes a tus relatos...


    abrazos

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  8. ainsssssss mi niñaaaaaa
    me ha encantado, aunque muy nostálgica nunca pierdes la mágia...


    Un beso con mucho cariño, guapisima!!

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  9. No sé si te había escrito alguna vez pero tu cuentos sobre la luna me encantan! Me estoy enganchando a tu blog!!

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  10. \\\///
    (O_O)
    La mágica luna es capaz de inspirar el mejor de los relatos, como este que nos regalas hoy.
    Un saludo.

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  11. Ayyyyy pobre luna esclava de si misma!!!...Seguramente sea algo así en su fase menguante y nueva para despertar creciente y conseguir el mayor de sus brillos!!!. No está mal el relato!!! Es más, diría que me encanta!!!!

    El dibujo elegido me gusta muchísimo, y el video de Sirenia de 10!!!...

    Besitoooooooooooos...(Me has alegrado la mañana)

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  12. Precioso...
    Lleno de magía.
    Saludos

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Antes de nada: gracias.